Vivienda en Chamartín

El encargo consistía en reformar integralmente una vivienda espaciosa en su estado original, sin elementos de valor que merecieran conservación, lo que ofrecía total libertad para plantear un proyecto a la medida de los nuevos propietarios. Las estancias estaban muy compartimentadas, con pequeños recibidores que daban acceso a otros espacios, y que no se ajustaban al modo de vida de la familia, que buscaba una distribución más fluida y actual.

El proyecto eliminó todas esas zonas de paso, permitiendo que los metros se aprovecharan al máximo en las estancias principales, como el salón y la cocina, y reduciendo al mínimo los espacios de comunicación, dejando únicamente un pasillo.

El programa final incluye un gran salón-comedor, un aseo, una cocina con office y cuatro habitaciones, una de ellas en suite y otra destinada a despacho.

Para aportar carácter y personalidad, se mantuvieron las vigas de hormigón visto, que además ayudan a delimitar visualmente el salón. Se optó por materiales naturales y atemporales, que armonizan con el estilo del edificio; madera, tonos claros y algunos detalles de color, como el roble teñido de verde en la cocina. Además, se introdujeron tabiques y elementos curvos en zonas concretas, creando un paso más amable y fluido entre estancias.

La combinación de materiales naturales y detalles con personalidad, como el techo de circo en el dormitorio infantil, convierte la vivienda en un hogar cómodo, contemporáneo y con carácter.